El tendón de Aquiles conecta los músculos de la pantorrilla con el calcáneo (hueso del talón). Juntos ayudan a levantar el talón del suelo cuando usted se para en las puntas de los pies.
Usted utiliza estos músculos y el tendón de Aquiles cuando camina, corre y salta. En la mayoría de los casos, el dolor de talón se debe a un uso excesivo del pie. Rara vez es provocado por una lesión.
La tendinitis debida al uso excesivo es más común entre los jóvenes. Puede suceder en marchistas, corredores u otros atletas.
La tendinitis a causa de la artritis es más común en personas de mediana edad y adultos mayores. Se puede formar un espolón o crecimiento óseo en la parte trasera del calcáneo. Esto puede irritar el tendón de Aquiles y causa dolor e hinchazón.
Siga estos pasos para aliviar los síntomas y ayudar a que su lesión sane:
Aplique hielo sobre el tendón de Aquiles por 15 a 20 minutos, de 2 a 3 veces al día. Utilice una compresa de hielo envuelta en un trapo. NO aplique hielo directamente sobre la piel.
Tome analgésicos, como ácido acetilsalicílico (aspirin), ibuprofeno (Advil o Motrin) o naproxeno (Aleve, Naprosyn) para reducir la inflamación y el dolor.
Si su proveedor de atención médica lo recomienda, use una bota para caminar o cuñas para el talón.